Sin dudas este 8 de marzo 2021 fue un año de conmemoración diferente para todas las mujeres de las Américas, por la pandemia que no se logra contener y que arremete cada vez con más fuerza en el mundo. Estamos ante situaciones sanitarias que nos condicionan a mantenernos aisladas y enfrentar de manera virtual las tareas y compromisos que antes se realizaban de forma presencial. Ese proceso no ha sido fácil, considerando que las condiciones económicas de las mujeres están marcadas por la precariedad por tanto muchas veces, no están los medios económicos que permiten tener equipos tecnológicos adecuados para mantener una buena comunicación entre nosotras y las organizaciones que integramos y a las que representamos. A pesar de todos los obstáculos, las mujeres seguimos movilizadas desarrollando acciones, esta vez de forma descentralizada para romper los cercos comunicacionales impuestos por los gobiernos. En distintas latitudes de nuestra América se realizaron mítines relámpagos, manifestaciones artísticas, acciones de solidaridad, recitales, foros virtuales, marchas, pegatinas, lienzos, murales, y muchas otras acciones al alcance de nuestras fuerzas para unir las voces del feminismo a través del continente. Todo esto evidenció que las mujeres seguimos fuertemente unidas en contra de las opresiones que marcan los sistemas capitalistas y patriarcales que dominan la política, la cultura y la economía en los territorios de América. En la Marcha Mundial de las Mujeres nuestro lema “Resistimos para Vivir, Marchamos para Transformar,sigue vigente este 2021, a diario resistimos la pobreza para seguir viviendo y para mantener en alto el espíritu solidario que acompaña las luchas de las mujeres. Y marchamos para transformar porque las manifestaciones populares y las acciones callejeras no permanecen en la invisibilidad y serán las demandas multitudinarias las que pondrán la alarma que traspasan las fronteras ante las injusticias y atropellos a los derechos humanos que se cometen en los territorios locales y regionales. Necesitamos mantener esta fecha histórica reivindicativa de las mujeres y feministas en el mundo por los derechos sociales, económicos y culturales, como una instancia deliberativa, de concientización y de mutuos aprendizajes en el proceso de avance por la participación política de las mujeres, por la incorporación de leyes que protejan los derechos sexuales y derechos reproductivos y por la protección efectiva desde los sistemas estatales, para sancionar y erradicar la violencia hacia las mujeres y las disidencias sexuales. Por todo ello, el 8 de marzo es y seguirá siendo un día simbólico para las mujeres que aspiramos a tener una vida plena, a través de la lucha de nuestras organizaciones y las alianzas nacionales e internacionales contra este sistema capitalista-patriarcal base de las opresiones del mundo.
“Seguiremos en marcha hasta que todos y todas seamos libres” . Mafalda Galdames
¡Resistimos para vivir, marchamos para transformar! We resist to live, we march to transform! Nous résistons pour vivre, nous marchons pour transformer ! Resistimos para viver, marchamos para transformar!