El estallido social jujeño se hace sentir el 15 de junio de 2023, cuando en la legislatura provincial, se instaba a la aprobación de lo que implica el avasallamiento de los derechos del pueblo. El conflicto aparece en escena cuando se lleva a votación la reforma de la Constitución provincial, que sanciona una serie de articulados en pos de la autonomía federal para la toma de decisiones, y una serie de libertades para deliberar sobre las tierras y los recursos naturales. Entre la serie de represalias que suscribe la reforma criminaliza la protesta social, en su llamado a la “paz” que implica el cese de huelgas o la persecución desmedida como castigo, como así también el antidemocrático ejercicio de la modificación de las fechas del derecho al sufragio, eliminando las votaciones cada dos años de la conformación de la legislatura. ¿Quiénes y para quién gobiernan en Jujuy? En la perspectiva de la alianza entre reforma constitucional y violaciones de los derechos humanos, y un ejercicio de la legislación exprés en función de las necesidades de un gobierno presidido por una facción derechista neoliberal juega un papel fundamental pensar “qué se avala con este proyecto político”- saqueo y hambre para el pueblo, son cientos de los gritos que aún hoy continúa encarnando Jujuy.
Entre los reclamos se hace escena la condición de “una vida digna”, que para nada viene siendo el reflejo de este gobierno, que hoy lleva su segundo mandato, salarios por debajo de la línea de la pobreza, no apertura o diálogo paritario, precarización y falta de trabajo formal son algunas de las formas que engloba la tendencia de gobierno que propone Morales. Pero lejos de ser el escenario completo, la desidia que sufre el pueblo es sinónimo del enriquecimiento de algunxs pocxs, el gran premio se lo llevan los extractores del Litio Allkem Ltd. y Livent Corp., multinacionales que a costa de la vida de nuestro pueblo y la expropiación y explotación de nuestros recursos ahora también gozan del beneficio del amparo de la ley constitucional que les permite continuar sus negocios manchados de sangre, apropiándose de las tierras que por Ley Nacional 26.160 son de pueblos originarios.
LA OTRA ALIANZA: UNIDAD Y SOLIDARIDAD Ninguna lucha se pierde cuando hay un pueblo organizado por sus derechos, por ello hace más de un mes que el pueblo jujeño sigue levantándose por los derechos de una patria con soberanía nacional y justicia social. Y aún con los intentos de silenciamiento, con la balas y la sangre que se derramó por la persecusión y hostigamiento que sufrió y sufre la clase trabajadora que pone batalla al renunciamiento de la tierra, aún con los arrestos arbitrarios e ilegítimos, el pueblo no se calla, hay resistencia, hay unidad. La alianza se profundizó cuando varios sectores de trabajadores confluyeron en la necesidad de reunirse y salir a pelear contra la reforma que afecta tanto al pueblo jujeño, como a toda la Argentina, siendo un modelo de intervención de los gobiernos sobre las tierras, los recursos y lxs ciudadanxs. A los pueblos Atacama, Kolla, Guaraní, Kolla Guaraní, Ocloya, Omaguaca, Tilián, Toara y Toba, que resisten hace más de 200 años por la recuperación de las tierras y que exigen el cumplimiento de la ley que fue sancionada para no permitir ninguna expropiación más. Se suman los sectores de trabajadoras y trabajadores de la educación que reclaman por condiciones salariales que les permitan llegar a la canasta básica, y quienes denotaban que era necesario habilitar espacios donde debatir y construir, mesas técnicas para el alcance de mejores condiciones laborales. La alianza multisectorial es un foco de desencadenamiento de lo que podría llamarse la verdadera insurgencia popular, que mantiene en vilo al país, y aún así no acusa intervención del Estado Nacional. Al momento las intervenciones son de organismos de derechos humanos por el desmedido incremento del uso de violencia, por el ejercicio represor que busca acallar a la clase trabajadora, que lucha en las calles bajo la consigna ¡Arriba los derechos, Abajo la reforma! Una vez más, Mujeres, niñxs, jóvenes, que desfilan en los cortes de ruta ponen sus cuerpas para defender el sueño de la otra patria posible, tallan con sus voces el camino de otras que quieren ver nacer con más derechos, libres. Argentina, el epicentro de un conflicto de siglos, hoy se viste de ley para que lo que se empuña sea un atropello constitucional. Todavía nos queda mucho por aprender de nuestra historia latinoamericana, y hasta que eso sea posible seguiremos resistiendo hermanadas, seguiremos denunciando, en estado de alerta y movilización ¡hasta que caiga la reforma!