En el marco de las reuniones de Alba Movimientos y el encuentro para una Alternativa de los pueblos la Marcha Mundial de las Mujeres Venezuela tuvo la oportunidad de intercambiar con compañeras de la MMM de Brasil. Ana Priscila Alves responsable de asuntos internacionales de la CN de Brasil y Bianca Pesoa de Capire, se acercaron al proceso formativo de la cooperativa de mujeres Tramuco. En el encuentro pudieron observar la metodología de formación y construcción colectiva entorno al reglamento interno de la cooperativa. Tramuco es un proyecto impulsado por Tinta violeta, colectiva miembra de la MMM, que organiza a 50 mujeres entorno a la puesta en marcha de un sistema de gestión comunitario de basura y el aprovechamiento del plástico para la fabricación de maderas plásticas. Para las asociadas de TRAMUCO el poder compartir con hermanas de otras partes del continente su experiencia productiva y oír sus palabras de aliento es fuente de energía. Tramuco, enlaza la superación de las condiciones económicas de dependencia y de trabajos precarizados que hacen a las mujeres vulnerables a las violencias machistas, con la construcción de modelos productivos que den respuestas reales a los problemas de sus comunidades. Luego de la visita a TRAMUCO las compañeras Ana Priscila y Bianca se encontraron con la colectiva feminista Tejiéndonos mujeres, organización de feminista dentro de la comuna 5 de marzo Chávez comandante eterno que también son parte de la MMM en Venezuela La visita a la comuna comenzó en el centro de distribución Somos Karive , donde se dan cita pequeñas experiencias comerciales comunitarias, allí Diana Scheifes dio la bienvenida a las compañeras brasileñas y les explicó como el Frene Cultural de Izquierda (organización a la que pertenece la colectiva feminista) nace en la universidad para luego abrazar la propuesta revolucionaria de construcción de la comuna antipatriarcal, anticapitalista y antiracista. Muchas y muchos de los miembros se han mudado a los espacios geográficos de construcción comunal, pues, no se puede proponer sin conocer la realidad de primera mano. Luego subieron a la comuna donde Manuela Sánchez Ávila y Emily China les compartieron los proyectos que se llevan a cabo en la Casita Morada de la comuna, un centro comunitario de atención a las mujeres, niñas, adolescentes y personas de las disidencias sexuales. Manuela y Emily compartieron con Ana Priscilas y Bianca como han resistido a las más de 1000 sanciones que han impuesto al pueblo venezolano y que a quienes más afecta son a las mujeres, a las encargadas de las tareas de cuidado y de la organización comunitaria. Manuela señala que ¨Poder compartir las maneras que hemos construido para hacer frente a esta coyuntura, para poder construir un tejido comunitario que nos arrope en este proceso, compartir nuestra apuesta ante el bloqueo. Hemos apostado a una comunalización de la vida y a colectivizar los cuidados y las herramientas de apoyo, para nosotras es muy valioso poder mostrarlas” Emili subraya que la visita de las compañeras es un recordatorio que en la lucha no están solas: “La visita de las compañeras son un recordatorio de que en la lucha no estamos solas y en alguna parte fuera de nuestra cotidianidad hay otra mujer, sino con las mismas luchas, al menos similares. Estar tan metidas en la dinámica te da mucho para pensar, pero tener compañera de otras latitudes ayudan a tener otras perspectivas”.
Violencia política contra las mujeres posición de MMM Venezuela
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